Adrew Geoffrey Kaufman (más conocido comúnmente por Andy Kaufman) puede ser definido de muchas formas: cómico, showman, cantante… pero quizá la mejor manera de hacerlo sea a través de su propia opinión. Según él, lo que hacía no se podía clasificar, él era «simplemente él», alguien provocador y polémico hasta límites ofensivos.
Nuestro hombre nació en Nueva York allá por 1949 y ya desde pequeño mostró sus ganas de destacar en el mundo del show: «While all the other kids were out playing ball and stuff, I used to stay in my room and imagine that there was a camera in the wall (…)» («Mientras los otros niños estaban fuera jugando a la pelota, yo solía quedarme en mi habitación y creer que había una cámara en la pared»).
Con el tiempo, Andy viajo a Boston para estudiar negocios en la Graham Junior College en Boston, graduándose en 1971. Comenzó entonces sus andanzas por clubes de la costa este dando un espectáculo no del todo aceptado.
Fue durante estas pequeñas apariciones donde nació su principal personaje, el hombre extranjero (posteriormente Latka Gravas), una persona nacida en un país imaginario llamado «Caspiar», una isla hundida del mar Caspio. Fue tan real su interpretación que nadie conoció a Andy Kaufman hasta tiempo después. Entre su repertorio contaba con varias imitaciones (Richard Nixon y Elvis eran sus favoritas) y ocurrió que durante una de sus actuaciones conoció a George Shapiro (productor y manger televisivo).
El 11 de octubre de 1975, su carrera alcanzó un momento de gloría que le llevaría a la fama hasta el día de su muerte: su aparición en «Saturday Night life» interpretando el tema principal de Mighty Mouse (ver aquí). Esta interpretación le llevó a numerosas apariciones por los programas de las televisiones americanas, incluídos los lates shows. Finalmente, firma un contrato en 1978 con la ABC para actuar como Latka en la comedia de situaciones «Taxi«.
Su admiración por la lucha libre le llevó a crear la «lucha libre unisex», un género donde peleaban hombres contra mujeres, y, de esta forma, logró crear una de las mayores polémicas de toda su historia, sobre todo cuando, retado por uno de los campeones de lucha libre Jerry Lawler, fingió una fractura de cuello y luego una pelea en directo durante el programa de David Letterman. Finalmente se descubrió años más tarde que todo estaba preparado.
Una de sus últimas apariciones polémicas en televisión, fue durante el programa de variedades (emitido en directo) «Fridays» en 1981. Andy ignoró el guión y formó un altercado tremendo llegando incluso a arrojar un vaso de agua al cómico Michael Richards, supuestamente, todo era una broma.
Un par de años más tarde, en 1983, los médicos le diagnotsticaron un raro caso de cáncer de pulmon que acabaría llevándose a Andy el 16 de mayo de 1984 pese a sus intentos de lucha en vano. No obstante y dada su forma de actuar, mucha gente se tomó su muerte como una broma más, o incluso se llegó a hablar de una reaparición (como ocurrió con Elvis, uno de sus ídolos). Se trate de una broma o no, Andy dejó durante su vida una huella gracias a su estilo loco y atrevido, propio de un lúnatico.
EL LUNÁTICO KAUFMAN 